Mexico Faces Economic Stagnation and Recession Risks

Amid persistent inflation, economic stagnation, challenges in fiscal policy, and a highly uncertain and fragmented global environment, Mexico faces a challenging economic scenario, with a likelihood of entering a mild recession in the coming months, warned the International Chamber of Commerce Mexico (ICC Mexico).

“Mexico is currently operating below its economic potential, with a negative output gap that will widen over the next two years if current distortions are not corrected, and although there are international factors that could moderate the impacts—such as stabilization in energy prices or technological advances—the balance of risks remains clearly on the downside,” concluded experts convened by the Economic Policy Group of ICC Mexico, who agreed that under this scenario, the country faces a real risk of recession in 2025.

One of the issues causing concern is underlying inflation, which has rebounded in recent months despite weakening domestic demand and appreciation of the exchange rate, reflecting unresolved structural pressures, including sustained growth in unit labor costs.

In terms of fiscal policy, experts indicated that Mexico faces structural constraints due to a high public deficit, which limits the state’s capacity to respond to external shocks or finance development projects.

The analysis noted that the international environment in recent months has been characterized by economic and commercial uncertainty, where new tariff policies, particularly from the United States, have changed the rules of international trade and created tensions that directly affect highly integrated countries like Mexico.

Meanwhile, foreign direct investment is also affected by the lack of clarity and coherence in trade policies and the fragmentation of both commercial and digital flows, the organization emphasized in a statement.

It also warned about the negative effects of rising global debt costs, “a phenomenon that particularly impacts emerging markets, restricts financing, and puts infrastructure, health, and education investments at risk.”

Additionally, a concerning combination was identified: monetary policy remains restrictive, the economy shows signs of slowdown, and the labor market is weakening, with declining employment and rising informal employment.

In light of these challenges, it was emphasized that Mexico must adopt responsible and sustained measures to improve productivity, strengthen fiscal discipline, and restore confidence among national and foreign investors.

“The Economic Policy Group of ICC Mexico reiterated the urgency of acting with foresight, transparency, and responsibility in the design of public policies, as we are in an environment where global risks outweigh opportunities, and the country must prioritize macroeconomic stability and a strategy of intelligent integration into the global economy,” the analysis concluded.

The challenges facing the country have generated, among other factors, a decline in private consumption caused by the upward trend in inflation in Mexico, which stood at 4.42% in the annual comparison for May last year, and by changes in U.S. trade policy, which have increased the level of uncertainty when deciding on the purchase of goods and services.

The outlook is not encouraging, as if things continue this way, Mexico’s economic growth would be only 0.2% for this year, as estimated by the World Bank (WB), and even as projected by the Bank of Mexico (Banxico), whose GDP growth forecast was only 0.1% for 2025.

— news from (T21)

— News Original —
Estancamiento económico y riegos de una posible recesión, entre desafíos que enfrenta México: ICC

Ante un contexto de inflación persistente, estancamiento en la actividad económica, desafíos fiscales y un entorno global altamente incierto y fragmentado, México enfrenta un escenario económico desafiante, con probabilidad de entrar en una ligera recesión en los próximos meses, advirtió la International Chamber of Commerce México (ICC México).

“México opera actualmente por debajo de su potencial económico, con una brecha negativa del producto que se ampliará en los próximos dos años si no se corrigen las distorsiones actuales y, aunque hay factores internacionales que podrían moderar los impactos —como la estabilización de precios de energía o los avances tecnológicos—, el balance de riesgos sigue siendo claramente a la baja”, concluyeron especialistas convocados por el Grupo de Política Económica de ICC México, quienes coincidieron que, ante dicha coyuntura, el país enfrenta un riesgo real de recesión en 2025.

Uno de los temas que causa preocupación es la inflación subyacente, que ha repuntado en los últimos meses a pesar del debilitamiento de la demanda interna y la apreciación del tipo de cambio, lo cual refleja presiones estructurales que no han sido resueltas, entre ellas, el crecimiento sostenido de los costos laborales unitarios.

En materia fiscal, los especialistas indicaron que México enfrenta restricciones estructurales derivadas de un elevado déficit público, que limita la capacidad del Estado para responder a choques externos o financiar proyectos de desarrollo.

En el análisis señaló que el entorno internacional en los últimos meses se ha caracterizado por una incertidumbre económica y comercial, donde las nuevas políticas arancelarias, en particular de Estados Unidos, han modificado las reglas del comercio internacional y generado tensiones que afectan directamente a países altamente integrados como México.

En tanto, la inversión extranjera directa también se ve afectada por la falta de claridad y coherencia en las políticas comerciales y por la fragmentación de los flujos tanto comerciales como digitales, enfatizó el organismo en un comunicado.

También se alertó sobre los efectos negativos del aumento en el costo de la deuda a nivel global, “un fenómeno que impacta especialmente a los mercados emergentes, restringe el financiamiento y pone en riesgo inversiones en infraestructura, salud y educación”.

Además, se identificó una combinación preocupante como es el hecho de que la política monetaria se mantiene restrictiva, la economía muestra signos de desaceleración, y se observa un debilitamiento del mercado laboral, con caída en la ocupación y aumento del empleo informal.

Ante esos retos, se subrayó en la necesidad de que México adopte medidas responsables y sostenidas para mejorar la productividad, fortalecer la disciplina fiscal y restaurar la confianza de los inversionistas nacionales y extranjeros.

“El Grupo de Política Económica de ICC México reitera la urgencia de actuar con previsión, transparencia y responsabilidad en el diseño de las políticas públicas, ya que nos encontramos en un entorno donde los riesgos globales superan a las oportunidades, y el país debe priorizar la estabilidad macroeconómica y una estrategia de integración inteligente en la economía global”, se puntualizó en el análisis.

Los desafíos a los que se enfrenta el país han generado, entre otros factores, una caída del consumo privado ocasionada por la tendencia al alza de la inflación en México, la cual se ubicó en 4.42% en mayo pasado en su comparativo anual, y por los cambios de la política comercial de Estados Unidos, que han elevado el entorno de incertidumbre al momento de decidir sobre la adquisición de bienes y servicios.

El panorama no es alentador, ya que de seguir así, el crecimiento económico mexicano sería de apenas 0.2% para este año, como ha estimado el Banco Mundial (BM), e incluso como lo ha proyectado el Banco de México (Banxico), cuyo crecimiento del PIB previó que será de solo 0.1% para 2025.

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