The decision to shut down Radio Ciudadana, a municipal radio station in Concordia, has caused widespread surprise and concern among its staff and listeners. The news broke during the station’s morning broadcast, which concluded with hosts unaware of the impending closure, bidding listeners farewell with “until tomorrow.”
The closure followed a session of the local council where a proposal from the executive branch was approved by nine votes. The ordinance, introduced by Mayor Azcué, authorizes the dismantling of the Public Radio Commission (CARP). Shortly after the vote, the municipal government issued an official statement confirming the decision and indicating that affected employees would be reassigned, relocated, or dismissed based on departmental needs. Notably, the term “dismissed” was not included in the original proposal, raising concerns about transparency.
Journalist Laura Terenzano expressed frustration over the lack of clarity regarding job security for the station’s employees. She criticized the justification for the closure, stating that citing economic reasons was an unacceptable pretext. Terenzano emphasized the importance of public access to diverse voices and warned that the city’s information landscape would now be dominated by private media, which may not always uphold journalistic integrity.
Marcelo Maffey, another journalist from the station, recalled the station’s history since its launch in 2015. He highlighted the team’s dedication to providing accurate and timely information to the community. The sudden nature of the decision left many confused, with no prior communication from the administration to explain the situation. Maffey noted that many employees had worked at the station for seven or eight years, and the abrupt closure left them uncertain about their future.
Lucrecia Carmarán, another journalist, pointed out the irony that the current administration, which once benefited from open access to media during its time in opposition, now seemed to be limiting such opportunities. She described the closure as part of a broader ideological agenda, with the station being a platform for diverse perspectives that may have clashed with the current government’s interests.
— News Original —
Los periodistas de Ciudadana señalan que “lo económico es un pretexto” para cerrar la radio
Cierre radio municipal Concordia. La noticia cayó como un balde agua helada en las instalaciones que la radio tiene en la Ex Estación Norte del Ferrocarril Urquiza.
Tal fue la sorpresa, que la reducida programación matutina, que tras la última intervención quedó entre las 6 y las 10 de la mañana, concluía con la novedad de que un tema vinculado a la radio había ingresado al Concejo, pero quienes estaban al micrófono se despidieron con un “hasta mañana”.
Sin embargo, en la sesión del Concejo Deliberante, el edil Felipe Sastre ya había pedido el tratamiento -sobre tablas- del proyecto de ordenanza promovido por el propio Azcué y que faculta al Ejecutivo a desmantelar la Radio Pública. Norma que fue aprobada por nueve votos.
A poco de ser votada, desde el municipio se emitió un comunicado oficial, donde se confirmaba que “el Concejo Deliberante aprobó un proyecto presentado por el Poder Ejecutivo mediante el cual se estableció la derogación de la Ordenanza de la Comisión Administración de la Radio Pública de Concordia (CARP)”.
Allí también transparentaba que, “en cuanto al personal, se establece que será reubicado, reasignado o prescindido de acuerdo a las necesidades existentes en las distintas áreas municipales”. Destacándose la acción de “prescindir” de personal, lo cual, en rigor, no figura en el proyecto aprobado.
Incertidumbre
Fue la periodista Laura Terenzano, quien, al hacer las primeras declaraciones al respecto, comenzó señalando que, “no hay nada peor en la vida de una persona que tener incertidumbre laboral, y eso es lo que están viviendo muchos de nuestros compañeros y compañeras”.
En ese contexto, “lo más triste, es que cuando una pide respuestas, mandan a una persona que dice que no sabe, que no preguntó, que bueno que ya nos van a avisar”.
Para la reconocida periodista, “esto es un capítulo más de la motosierra ideológica”, agregando que, “cerrar una radio por una cuestión económica es un pretexto realmente inaceptable”, ya que “no hay nada peor que una ciudadanía desinformada”. También subrayó que ahora, “la información en la ciudad quedará absolutamente en manos de los privados” y si bien reconoció que, “hay medios privados que lo hacen con mucho honor”, hay también “otros que no”.
Terenzano dijo que la radio Ciudadana “era un refugio en donde vos podías escuchar una variedad de voces importantes”, por lo que insistió en que, “esto es más una motosierra a la libertad de expresión, al periodismo de verdad, que la cuestión económica” y “como ya pasó en otras áreas de la municipalidad, va a haber personas que el lunes no van a tener trabajo”, lo cual “es tremendo”
Desde el 2015
En ese mismo sentido se expresó el periodista Marcelo Maffey, quien recordó que, desde los comienzos de la emisora, allá en el 2015, “hemos entregado y dado todo para que esta radio figure dentro de las más escuchadas”, entre otras cosas, porque “le decíamos a la gente que aproveche el minuto que tenía a través del contestador, para poder expresarse y decir lo que sienta”. Con un equipo periodístico que siempre “llevó información clara y precisa. Cubriendo todo lo que nos ha tocado hacer, con el mayor de los profesionalismos”.
Reconoció que la novedad los tomó por sorpresa, al punto que “arrancamos el día de una manera y terminamos cerca del mediodía, con esta angustia tan grande”. Sin saber, “qué pasó en el intermedio, para que nadie haya hablado con nosotros con antelación y explicarnos la situación”.
Mafey advierte que “de la noche a la mañana, se cierra una de las radios más importantes que tiene la ciudad”, con la consecuencia de que mucha gente “no sabe qué es lo que viene” en lo que respecta “a la continuidad laboral de nuestros compañeros”, entre los que “hay gente que tiene 7 u 8 años trabajando”.
Micrófonos abiertos
A su turno, la periodista Lucrecia Carmarán recordó que “cuando los que hoy gobiernan (gstión Azcué) eran oposición, tuvieron siempre los micrófonos abiertos”, contrastando con que, por entonces, “a nosotros nadie nos llamaba para decir que no hablemos con uno o con otro”.
Es por eso que, “la verdad, lamento mucho que ahora, en los argumentos que estaban dando algunos concejales, hablaban de persecución, de que (en esta radio) se hablaba de ellos”. Cuando en realidad, “hemos tenido, en este año y pico de gestión, hostigamientos por todos lados”.